Case Study: Nonsense 2.0

Lo comentaba en su momento, hace más de un año, cuando se publicaba la noticia y el título de la entrada era lo suficientemente elocuente, «Muerto al llegar»; pero, no contentos con aquello, ahora se produce el «lanzamiento», en beta 😉 de WikiTel. Lo explican en el blog de la cemeté y me motiva para documentar un caso evidente de «Nonsense 2.0» que continuaría, de alguna forma, la línea de pensamiento del «Part Time Guru 101» dos entradas más abajo.

¿Por qué califico de «sin-sentido dospuntocero» esta iniciativa? Por muchos motivos; salvando lo obvio, que necesito pasar el rato hasta la hora de la cerveza, hay ciertos aspectos de la misma que ilustran algunos lugares comunes de la «tontuna» del ser humano en su relación con la que, curiosamente, es su más humana creación, la (info)tecnología:

• La propiedad no significa apropiación. Aun habiendo corrido ríos de tinta (digital) alrededor de mal entendidos conceptos como la inteligencia colectiva, la colaboración, los espacios cooperativos para el trabajo en grupo, «la Web como plataforma», la cultura de los aficionados, etc. parecemos seguir empeñados en tener nuestra propia «cajita» particular para guardar nuestros tesoros, en forma de conocimiento sectorial explícito en este caso. Tenemos la cajita, es «nuestra»; pero no hemos aprendido nada por el camino. Pensemos en algo más prosaico y cercano: las tesis de nuestros doctores ¿Acaso tiene importancia alguna el contenido de esos gruesos volúmenes que seguimos almacenando cual pira funeraria en las bibliotecas de nuestras universidades? ¿No será quizás más importante el cambio que se hubiere obrado en la mente del doctor durante el proceso de elaboración de aquel contenido; y que perderemos por nuestra incapacidad para conectarle con otras mentes capaces, además de que tenga que cambiar de país para ganarse la vida con su trabajo?
• Las pegatinas no tienen valores. Como en tantas otras ocasiones, hemos puesto las pegatinas correspondientes en otro «órgano de propaganda del partido», ¿No es genial? Ahora también la CMT es cool. Insisto: sigue faltando el ¿Para qué? What4? ¿Ha cambiado la forma de trabajar de las «personas» que forman parte de ese organismo? Yo creo que no; que es simple comunicación corporativa. Pensemos en los ejemplos de conversión a la fé del «dospuntocero» que parece haber teneido lugar recientemente entre algunas entidades bancarias en nuestro país: CAN, Banesto, BBVA, Bankinter, … ¿Transmite alguna «buen rollo»? ¿Acaso esas pegatinas han cambiado la lógica irracional de una crisis que no apunta culpables: yo te doy la pasta, tú la inviertes mal y la pierdes y me pides a mi más pasta para cubrir tus pérdidas?
• El control no otorga la autoridad. Lo discutimos en su momento: el concepto vigente de «autoridad» no nos sirve en el sitio al que vamos. ¿Comités Científicos? ¿Peer Reviewing? No sirven, tal y como están planteados. Aceptémoslo o no avanceremos. Lo cual no quiere decir que lo contrario funcione: la «oclocracia» no es la solución. Pensemos, como no podía ser de otra forma, en la Wikipedia, en su evolución histórica en términos de participación y en los debates sobre su modelo de creación cooperativa de contenidos; pensemos en cómo surgía Citizendium y cómo ha evolucionado.
• Vivir del terreno o comprarlo. Es una máxima del guerrillero, «vivir del terreno». El conocimiento del que pretenden ser garantes y portadores en WikiTel ya existe en la Red; las herramientas para explicitarlo, también. ¿Por qué no invertir en una alfabetización digital efectiva –en el sentido de apropiación que decía más arriba- de las personas que forman parte del rancio sector de las telecomunicaciones, en lugar de reinventar nuestra particular rueda ‘onemoretime‘? Por perras no va a ser, sobre todo si la cantidad que publicaban aquí resulta cierta. Pensemos en el periodismo ciudadano, por ejemplo: las secciones de participación de las cabeceras de todos conocidas frente a un movimiento creciente de ciudadanos que tienen cosas que contar y que lo hacen echando mano de los medios que la Red pone a su alcance.

Para no hacer esto muy largo, puesto que la hora de la cerveza se acerca a toda velocidad, diré que, siguiendo con la misma lógica de «gurú a tiempo parcial» que referenciaba al principio, también debemos apreciar la iniciativa en su contexto: un sector, el de las telecomunicaciones, un tanto rancio, enmarcado en la heterogénea dinámica de cambio del hipersector de las infotecnologías, absolutamente sectarizado, intervenido y ··· de nuestra «floreciente» economía –sí, es ironía. Es posible que este tipo de iniciativas ayuden a que los actores que tienen algo que decir en tal escenario se animen a experimentar con herramientas y formas de trabajar que aun se escapan de la realidad del mismo. En cualquier caso, si no hacemos algunas reflexiones como las anteriores todo se quedará en la simple excitación por la tecnología del momento o puede que ni eso.